En el Chalet Garena diseñamos un espacio que combina elegancia y funcionalidad, donde la luz natural se convierte en la gran protagonista. Cada estancia ha sido pensada para generar amplitud y armonía, con una distribución que fluye de manera orgánica entre las diferentes áreas de la vivienda. Los materiales nobles y la paleta de colores neutros aportan serenidad, mientras que los detalles de mobiliario y decoración refuerzan la identidad del hogar.

El proyecto buscaba transmitir calidez sin renunciar a la modernidad, creando un ambiente acogedor que se adapta a la vida cotidiana de sus habitantes. Desde la integración de la cocina abierta al salón hasta la conexión con los espacios exteriores, cada decisión de diseño responde al equilibrio entre estética y comodidad. El resultado es un chalet que no solo se habita, sino que también se vive como una experiencia de bienestar y estilo.